El cuidado de la vista en el entorno laboral.

Cada día, los adultos pasamos aproximadamente un tercio de la jornada en nuestro puesto de trabajo. Esto supone un sobreesfuerzo para la vista y es, por tanto, causa de fatiga visual y sequedad ocular.

Los ojos son una de las partes de nuestro cuerpo que más se resiente en el entorno laboral.

Según los últimos datos del Ministerio de Trabajo, hasta el mes de agosto de 2018 se registraron un total de 11.175 lesiones en los ojos de trabajadores durante su jornada laboral siendo, con mucha diferencia, la parte de la cabeza más afectada por los accidentes.

A continuación, analizaremos cuáles son los principales riesgos y enfermedades oculares a los que se exponen los trabajadores junto con las recomendaciones para un cuidado diario.

Riesgos y lesiones oculares

El entorno laboral puede presentar diversos riesgos y desafíos para la salud ocular de los trabajadores. A continuación, se enumeran algunos de los riesgos y lesiones oculares más comunes en el ámbito laboral a tener en cuenta:

• Fatiga visual: molestias que se producen en el ojo tras someterlo a un esfuerzo continuado como, por ejemplo, al pasar muchas horas delante del ordenador.
• Lesiones producidas por cuerpos extraños dentro del ojo: puede ser desde pequeñas partículas que causen irritación e inflamación hasta metal o fragmentos filosos.
• Quemaduras químicas: Se pueden producir cuando el ojo entra en contacto con una sustancia química sólida, líquida o gaseosa.
• Abrasión corneal (coloquialmente rasguño): producida por un golpe o pinchazo en el ojo, o también puede ser consecuencia de frotarlo en exceso cuando hay un cuerpo extraño como arena o polvo.

Queratitis y conjuntivitis

Diversos estudios llevados a cabos por investigadores concluyen que las dos lesiones más frecuentes son la queratitis y la conjuntivitis, independientemente de la edad, sexo u ocupación.

• La queratitis es la inflamación de la córnea, el tejido transparente con forma de cúpula en la parte delantera del ojo, que recubre la pupila y el iris.
• La conjuntivitis es una inflamación o infección de la membrana transparente entre el párpado y el globo ocular.

Con respecto a las lesiones oculares más comunes destacamos:

• Riesgos térmicos por frío y calor.
• Riesgos químicos: por la acción de polvo, líquidos corrosivos o sustancias tóxicas.
• Riesgos por radiaciones: puede darse en trabajos industriales por soldadura, radiación infrarroja, radiación, o láser.
• Riesgos termo-mecánicos ante salpicaduras de metal fundido.
• Riesgos mecánicos por impactos de partículas proyectadas, astillas o perforaciones.

¿Cómo podemos cuidar los ojos en el trabajo?

Proteger los ojos en el trabajo es esencial para prevenir lesiones y mantener una visión saludable a largo plazo. A continuación, proponemos algunas medidas y prácticas según se trate de: trabajos en la oficina, al aire libre, o en entornos industriales.

Descargar el cuidado de la vista en el entorno laboral

• Trabajos con pantalla:

Correcta iluminación en el puesto de trabajo y ajuste del brillo de la pantalla.

Regla del 20 – 20 – 20. Parar cada 20 minutos, durante 20 segundos, y mirar a una distancia de 20 pies.

Parpadear con frecuencia ayudará a evitar la irritación de los ojos.

Mantener una distancia mínima de 40 centímetros respecto al dispositivo, según marca el Real Decreto 488/1997.

• Trabajos al aire libre:

Protección ocular y facial. Con gafas de protección, pantallas faciales y protectores oculares y faciales.

• Trabajos en entornos industriales:

Estos entornos de trabajo son los lugares más propensos a sufrir lesiones oculares. Será necesario contar con el correcto uso de EPI, tanto gafas de protección como pantallas con filtros de protección ocular adecuados.

En conclusión, el cuidado de la vista en el entorno laboral es fundamental para prevenir lesiones y mantener una buena salud ocular. Los trabajadores están expuestos a diversos riesgos dependiendo de su área de trabajo, ya sea en oficinas, al aire libre o en entornos industriales. Implementar medidas preventivas, como el uso de equipos de protección individual y la adopción de buenas prácticas, es esencial para minimizar los riesgos y asegurar una visión saludable a largo plazo.